lunes, 4 de marzo de 2013

MARZO




Anoche comprobé,
con una sola mano y casi la boca,
que sigues siendo
todavía
sensible a mis caricias.
Y pienso entonces
en otros lugares,
quehaceres mejores donde
ser y estar.
Hazme caso:
no dejemos a la improvisación
este deseo
                     que nos quema.




PD: Canción que le dedico a Tortuga.

 

2 comentarios:

  1. El quemar del deseo digo yo que siempre tiene algo de improvisado... al menos a mí, cuando la planificación se me ha metido por medio, me ha huido hasta el querer.

    Muy bellos versos.

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  2. Yo llevo ese cd en el coche. Pero mi favorita es una canción que canta a pelo, una oración en la que pide a Dios un Mercedes Benz y una tele en color. Y a veces me gustaría cantar como ella y decir: OH LORD, no te gustaría, hoy a las 2, dar clase en primero de la ESO?

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