A Katy.
Tendrás que disparar tarde o temprano.
La ciudad es un dédalo de sombras
y aulladores
que no cesan de su empeño.
Habrá un momento en que
tendrás que decir
BASTA.
Venga, dispara.
¡Dispara!
Si no lo haces tú,
lo haré yo.
La ciudad es solo el hormiguero. Ninguna hormiga te consiente que no vayas siguiendo el rastro fórmico. Seguir otros rastros está penado con la exclusión, por eso es difícil encontrar quien dispare y por mucho que tu lo hagas nadie querrá ponerse a tiro.
ResponderEliminar(Pocas palabras, magníficos versos)