Cuando ya empezaba a hacer ese frío
que se cuela por las faldas de las señoronas
que apestan a viejos perfumes.
Cuando el padre sacaba a pasear a su hijita
y le pedía que no corriera, o se caería
(tranquilo, papaíto, que tu hija se ha de caer una y mil veces).
Cuando se cruza una chica que pasea a un perro
junto a la Catedral , y lleva un pañuelo verde.
Cuando los zapatos de ese escaparate están más caros.
Cuando el viejo y su hijo cierran el quiosco.
Cuando decoran una tienda de cosas del hogar.
Cuando dos chicos se cruzan junto al Banco y la cafetería,
y miran, y sonríen, no se sabe por qué.
Entonces, aparece la chica triste que come nachos
por la calle Trapería, sola, vulgar y triste otra vez.
Murcia, 11-03-2009
Vulgar para quien??? hay miradas que embellecen, que nos hacen elegantes... u originales...
ResponderEliminarEstá muy bien, pero creo que los verbos en pasado del principio del poema (empezaba, sacaba, pedía, caería) deberían de estar en presente, para ser coherente todo el poema.
ResponderEliminary???? :O
ResponderEliminarMezclo bien con los Nachos en presente,pasado y futuro.
ResponderEliminarEs la vida, siempre la misma y a la vez distinta, todo depende desde la mirada que se contemple.
ResponderEliminarTal vez te dirán que la letra es demasiado pequeña, yo sin embargo diré que está bien, incluso si me apuras excesiva y razono:
En esta Sociedad consumista nos están acostumbrando a tener que pagar un precio por todo,incluso por algo ya pagado de antemano, sin embargo algunos dan o quiero pensar damos tanto sin apenas nada a cambio. ¿No está bien que al menos alguna vez se tengan que molestar un poco para gozar de algo que cuesta tanto trabajo y por lo que se recibe tan poco, incluso a veces críticas?
Me encanta leerte Noe, me crea intriga y eso para mí es bueno.
Besos.
Gracias, Acróbata.
EliminarSí, cuesta. Y qué poco se valora.
Un beso!
pd: intriga... Normalmente no despierto eso en la gente...
a mi tb me gusta leerte ^^
ResponderEliminarNoelia a mi no me provoca intriga, me produce nostalgia, una nostalgia dulce como de pestiño almelado de la abuela en Navidad que ya nunca más volveré a comer y tus versos me retrotraen a esas sensaciones.
ResponderEliminar