Todo el día queriendo redactar este poema y ahora no recuerdo qué se supone que tenía que decir.
Los buenos escritores —no hace falta
repetirlo— son aquellos
que saben siempre, exactamente,
cuándo no deben escribir.
Pero ése
evidentemente
no es mi caso.
ROGER WOLFE
(De Días perdidos en los transportes públicos)
Cojonudo
ResponderEliminar