Me
fascinan tus medias de rayas rojas y blancas,
(o
negras, porque creo que tienes dos).
Cuando
te tiras al suelo a leer y las mueves lánguidamente,
como
cuando Humbert ve por primera vez a Lolita en el jardín de azucenas.
Secreta
catedral de mujer que enciendes la vida y la estima.
Eres la Musa de fuego de la que habla
Shakespeare,
y el ruido y la furia.
Porque podrías venir de cualquier
parte,
pero vienes desde el infierno
a lisiarme con tus zarpas.
El mejor espejismo
pero vienes desde el infierno
a lisiarme con tus zarpas.
El mejor espejismo
en
medio del desierto arábigo.
Sigue
moviendo tus piernas, que yo contemplo la cura de mis males
y
desordenaré en breve los rizos de tu pelo.
"Hay muchas imágenes imborrables
de nuestra relación, de esas que lo acompañan a uno hasta la muerte y que le
hacen sentir la dicha de haber vivido.
Esas imágenes permanecen en la
memoria, como escenas de alguna película, como pasajes de algún libro, como
momentos de música, calentando el alma." (JMA, "La esclava instruida")
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